02 de marzo de 2022. En el día de hoy, en el marco de la Segunda Parte de la Quinta Sesión de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEA 5.2), los delegados de los 175 países miembros acordaron por unanimidad alcanzar un tratado para enfrentar la contaminación plástica. La resolución aprobada otorga el mandato al grupo de negociadores para desarrollar un acuerdo legalmente vinculante para 2024, que aborde el ciclo de vida de los productos plásticos, incluyendo su producción, diseño y eliminación.
La resolución, basada en tres proyectos de resolución iniciales de cuatro naciones (1), establece un Comité Intergubernamental de Negociación (INC), que comenzará su trabajo en 2022. Se espera que presenten un instrumento legalmente vinculante, que refleje diversas alternativas para abordar el ciclo de vida completo de los plásticos, el diseño de productos y materiales reutilizables y reciclables, y la necesidad de una mayor colaboración internacional para facilitar el acceso a la tecnología, el desarrollo de capacidades y la cooperación científica y técnica (2).
De acuerdo con el mandato resultante, los países han tomado nota de que los niveles elevados y en rápido aumento de la contaminación por plástico y por microplásticos representan un grave problema ambiental a escala global, con impactos específicos en el medio ambiente marino y han remarcado el carácter transfronterizo de la contaminación, lo que demuestra la necesidad urgente de fortalecer la coordinación, la cooperación y la gobernanza a nivel mundial para tomar medidas inmediatas la eliminación a largo plazo de la contaminación por plásticos, en entornos marinos y de otro tipo, y de evitar el detrimento de contaminación plástica a los ecosistemas y las actividades humanas que dependen de ellos(3).
La resolución, titulada “Poner fin a la contaminación plástica: hacia un instrumento internacional jurídicamente vinculante”, ha tomado los puntos más ambiciosos surgidos del debate previo a su aprobación: el abordaje de la gestión del plástico desde la instancia del diseño -y no sólo en la gestión final posconsumo-, la inclusión de otros ecosistemas, además del marino, y su carácter de legalmente vinculante, entre otros.
La producción global de plásticos ha aumentado dramáticamente desde 1950, alrededor del 9% por año. En 2015 se produjeron cerca de 388 millones de toneladas de plásticos, de las cuales el 99,5% provino de fuentes basadas en el petróleo. Las principales aplicaciones que utilizan plástico son los envases y embalajes, la construcción y el transporte, que utilizan el 30%, el 17% y el 14% de la producción anual total de plástico, respectivamente. (4)
Se estima que la cantidad de plásticos en los océanos es de alrededor de 75-199 millones de toneladas. Las estimaciones de los aportes globales anuales de fuentes terrestres varían según los enfoques utilizados. Bajo un escenario business as usual, y en ausencia de las intervenciones necesarias, la cantidad de desechos plásticos que ingresan a los ecosistemas acuáticos podría casi triplicarse de unos 9-14 millones de toneladas por año en 2016 a 23-37 millones de toneladas por año proyectado para 2040 (lo que equivale a 50 kilogramos de plástico por metro de costa en todo el mundo). Usando otro enfoque, se proyecta que la cantidad se duplique aproximadamente de un estimado de 19-23 millones de toneladas por año en 2016 a alrededor de 53 millones de toneladas por año para 2030. (5)
Desde hace ya algunos años, la creciente presencia de residuos plásticos en los océanos viene ocupando un lugar preponderante de la agenda de gobiernos, organismos internacionales y espacios multilaterales debido a los impactos negativos que genera, no sólo en la biodiversidad sino, además, en actividades económicas, entre ellas la pesca y el turismo. La basura marina y la contaminación plástica ya son una amenaza grave para el desarrollo de las comunidades costeras, así como para el transporte marítimo y la operación de puertos. Mas recientemente, se ha comenzado a alertar sobre los eventuales riesgos a la salud humana asociados al consumo de fauna marina.
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) convocará un foro para fines de 2022 que estará abierto a todas las partes interesadas en conjunto con la primera sesión del INC, para compartir conocimientos y mejores prácticas en diferentes partes del mundo. Facilitará debates abiertos y garantizará que estén informados por la ciencia, informando sobre el progreso durante los próximos dos años. Finalmente, una vez finalizado el trabajo del INC, el PNUMA convocará una conferencia diplomática para adoptar su resultado y abrirlo a las firmas.
Para más información “Un acuerdo global contra la contaminación plástica de los océanos” del Círculo de Políticas Ambientales (2022)
(1) Clustering of draft resolutions and decisions for UNEA-5.2. https://wedocs.unep.org/bitstream/handle/20.500.11822/38074/clustering_of_draft_resolutions_-_unea-5.2_08_feb_2022%5bfinal%5d.pdf?sequence=1&isAllowed=y
(2) Historic day in the campaign to beat plastic pollution: Nations commit to develop a legally binding agreement. Press release. https://www.unep.org/news-and-stories/press-release/historic-day-campaign-beat-plastic-pollution-nations-commit-develop
(3) Resolución UNEA. “End plastic pollution: Towards an international legally binding instrument”. https://wedocs.unep.org/bitstream/handle/20.500.11822/38522/k2200647_-_unep-ea-5-l-23-rev-1_-_advance.pdf?sequence=1&isAllowed=y
(4) UNEP -United Nations Environment Programme (2018). “Mapping of global plastics value chain and plastics losses to the environment (with a particular focus on marine environment”.
(5) UNEP -United Nations Environment Programme (2021) “From Pollution to Solution: A global assessment of marine litter and plastic pollution”